viernes, 2 de enero de 2015

"Si vas a hacer algo como esto, hazlo con estilo"

No se me ocurre una mejor película para empezar este 2015. Aunque bien es cierto que es
en la segunda parte donde la trama transcurre en el 2015 (26 de octubre, no lo olvidemos), es y será siempre esta primera parte la que marcó un antes y un después en la cinematografía de los años `80. 

Marty McFly es un joven que vive en Hill Valey, al que le gusta invertir su tiempo con su novia, Jennifer Parker, o con un viejo y chiflado profesor, el cual está obsesionado con los viajes en el tiempo. El Dr. Emett L. Brown, Doc para los amigos, acaba convirtiendo un viejo DeLorean en una máquina del tiempo, la cual, tras una serie de catastróficas desdichas, acaba llevando a Marty hasta el 5 de noviembre de 1955, día en el que se conocieron sus padres. Por cultura popular sabemos que los viajes al pasado son peligrosos, ya que cualquier mínima alteración puede desencadenar una hecatombe en tu época (la Teoría del Caos llevada a los viajes espacio - temporales). 

¿Por qué sigue siendo una gran película?
El tandem que forman Michael J. Fox (Marty McFly) y Christopher Lloyd (Doc) ya es una
razón más que poderosa para verla una y otra vez. Sin embargo, es la interpretación de Crispin Glover la que a mí acaba cautivándome siempre (ese momentazo en el que entra en el bar y se pide un batido de chocolate y se lo bebe como si fuera un whisky, GENIAL!). Nuestro querido Crispin interpreta a George McFly, padre de Marty, un pringadete en la vida que consiguió a su esposa y a la familia que tiene, gracias a una casualidad de la vida. Al llegar Marty al pasado, subido en su flamante DeLorean, esa casualidad no ocurre como debería. 

Como Regreso al Futuro se convirtió en cultura popular:
Dirigida por Robert Zemeckis y producida por Steven Spielberg, la película nos dejó una serie de elementos y momentos que son parte ya del imaginario popular de todo aquel que vivió los `80. Que lo vivió o que, en mi caso, revivió debido a una hermana mayor (y en el caso de esta peli, también una prima) que venera los `80 por encima de todas las cosas. Así el DeLorean, el condensador de fluzo, la vestimenta de Marty McFly y la banda sonora son hoy parte de todos los cinéfilos, entre otras muchas cosas. 

Escena para el recuerdo: 
La escena inicial con todos los relojes, el rayo impactando en el reloj de la torre y haciendo funcionar el DeLorean o el increíble Marty regalándole a Chuck Berry el Johnny B.Good del que todos disfrutamos. Es muy difícil elegir.


**Curiosidad: el 5 de noviembre parece ser fecha clave en el cine. Es el día al que viaja Marty al pasado y es el día de la revolución en V de Vendetta. 

4 comentarios:

  1. Estupenda entrada dedicada a una gran película. Has hecho un análisis genial.

    Evidentemente, como buen ochentero, también es una de mis favoritas y la trilogía forma parte de mi preciada colección.

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    Respuestas
    1. Muchísimas gracias!
      Es una película muy buena, ya no porque sea de culto, si no porque me resulta graciosa, incluso después después de 30 años.

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  2. Que gran elección y que gran entrada para comenzar el año.
    Una de las películas que no me canso de ver, quizá porque crecí con ella, quizá porque me parece estupenda, quizá por ambas cosas.
    Bicos
    Krtles

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    Respuestas
    1. Me encantó, tenía recuerdos fugaces de ella, pero no la recordaba muy bien!!
      Es genial!!!

      Gracias por leer!!!
      Un biquiño,
      Lore

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Gracias por tu comentario!

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