"Chinchilla"

Ayer vi una de las películas más surrealistas y absurdas que he visto en mi vida, pero pese a ello, me pareció una muy buena película. Os hablo de Frank. Es muy probable que suene a chino porque se trata de una producción independiente, muy poco publicitada y que en Estados Unidos y España (entre otros) aún no ha sido estrenada. Tras ver el trailer hace unos meses (he de decir que lo vi en bucle varias veces porque me pareció desternillante), antes de ayer conseguí verla, aunque en inglés y sin subtítulos, como es obvio. 

El argumento es aparentemente sencillo. Jon (Domhnall Gleeson) quiere ser músico y digamos que tiene ciertos problemas para componer. Por cosas de la vida, el destino, serendipia, ya sabéis, se encuentra con un grupo pop que necesita un teclista y resulta ser que Jon es teclista. Lo que Jon no sabe es que esta banda no toca música convencional y que es un tanto excéntrica. Veréis, con lo de música no convencional  me refiero a sonidos más cercanos a gatos en celo o atropellados que a lo que por música conocemos, aunque también es cierto que escuchando lo que está de moda...yo me quedo en mi casa, con mi unicornio, no sé si me explico. 
El líder de la banda es Frank, un visionario que encuentra música en cada sonido que él o cualquier persona o cosa de su alrededor haga en su vida diaria. Toda la banda se encierra en una cabaña en Dublín para grabar un disco. Hasta aquí todo correcto, pero ¿cómo os quedáis si os digo que Frank lleva su cabeza siempre cubierta por otra cabeza de cartón piedra que NUNCA, insisto nunca, se quita? Aquí os presento a Frank: 

Por cierto, el que va dentro del cabezón es Michael Fassbender. Sí, sí, Fassbender, el mismo, en uno de sus mejores papeles sin duda. Y ahora me diréis que estoy pirada y que no veo más allá de sus ojillos azules y su barba pelirroja. Es muy, pero que muy difícil expresar cualquier tipo de emoción o incluso hacer reír solamente con los movimientos de tu cuerpo y el señor Fassbender lo consigue. Sin duda alguna el reparto está muy bien escogido, pues la rivalidad entre Maggie Gyllenhall y Domhnall Gleeson es increíble, lo rarunos y pasotas que son el resto y las técnicas de inspiración van desde lo hilarante a la vergüenza ajena. 

Sin más, deciros que me gustó más de lo que creía, no apta para humores difíciles y si no controláis un mínimo el inglés, esperad a que se estrene en España. 

Aquí os dejo el trailer: si os reís tanto como para verlo más de una vez, tenéis que verla, sino no.